Por Juan Tomás Valenzuela
El líder de la Fupú
se opone tajantemente
a un fiscal independiente
que pueda armarle un rebú.
Lo que quiere este pechú,
es que el control de la ley
sea parte del guararey
que él siempre tuvo control,
y que su procurador
viva en la Torre Caney.
Lo que pretende este hampón,
como bien dice Zapete,
es que si algún bretebrete
se arma aquí por corrupción,
personas como Rondón,
cómo Bauta, o como él mismo,
no sean echado al abismo
cómo hicién con Yanalán,
Berenice y la Germán,
solo por “puro egoísmo”.
De acuerdo a Leonel Fernández
y la banda que dirige,
si Abinader no corrige
el ataque a los más grandes,
el día que se arme un desbande
que afecte a su misma gente,
le armarán un expediente
los mismos procuradores,
que él mismo le rinde honores
y ellos le pelan el diente.
Lo que nos está advirtiendo
el tres veces presidente,
es que hay que ser diligente
con lo que viene ocurriendo.
Si el mismo no está juyendo
como juye Quirinito,
es por el juez Hiroito,
que una vez él designó,
para que le frene tó
lo que lo exponga en delito.
Juan de los Palotes
3 marzo 2022